Hiela la carne engarrotando los movimientos
parando el paso de la sangre en las venas.
El frío mata despacio apagando los colores del horizonte,
sumiendo a las almas en un blanco letargo.

El frío no da tregua y congela sentimientos
por allá por donde sopla,
paraliza emociones,
hiberna sensaciones y sin embrago
el frío es mi aliado.
El frío me acerca a tu cuerpo,
me empuja al cobijo de tus brazos
a buscar la piel de todos tus rincones,
me lleva a desnudarme y a enredarme contigo.
El frío nos oculta bajo sábanas en las mañanas de domingo.
Nos invita a fundirnos, a sentirnos despacio.
Me obliga dulcemente a buscar tu aliento,
a dormir en tu pecho escuchando el viento gélido.
El Frío nos envuelve y nos empuja a buscarnos,
a palparnos el calor que emana de nuestros cuerpos,
a querernos despacito muy calmados.
El frío me arrima el alma a la tuya
juntándonos el pecho,
el frío contigo en una eterna primavera.
ELI,17
No hay comentarios:
Publicar un comentario