Se deslizan por mi rostro dejando un surco salado
y me empañan la visión.
Quizás existan para eso...
para no ver la vida cruda y real,
quizás son un velo que me mantiene oculta
y encerrada en mi mundo de castillos.
Siento como se deslizan cálidamente por mis mejillas.
Seguro que son calientes para que me ayuden
a paliar el dolor del corazón, el calor siempre calma los dolores no?
Seguro que son saladas porque al igual que el océano,
son infinitas y siempre que evoque tu recuerdo,
acudirán a mis ojos como las olas a la playa...
O quizás solo signifique que me deshago por dentro,
que mi alma se quiere marchar de este cuerpo apaleado
para no sufrir nunca mas...
Sea como sea, están ahí, siento que cada vez hay más y más..
En mi océano interno se desata la tormenta y las olas están enfurecidas.
Hoy no tengo paz ni consuelo, solo me queda la esperanza de que al terminar la tormenta vuelva la calma a mi alma.
Ojalá que mañana salga el sol, un sol cegador que me queme los ojos para no sentir nunca mas la tremenda amargura que me produce tu rostro.
Que me ciegue para no poder ver como te alejas de mi.
...ojalá el brujo del cuento se apiade de esta alma y con un toque
de varita, me lleve a la nada y me entierre...
y me olvide...
y me ayude a olvidar.
Eli´13
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