Ultimamente estoy leyendo mucho sobre el dolor.
Sobre como afecta a nuestras vidas y como intentamos apartarlo como si fuera llama ardiente.
Lo que nos duele no nos gusta, lo que nos duele nos asusta y peleamos con uñas y dientes
intentando salir de los laberintos en los que las situaciones y decisiones de la propia vida nos encierra,
tirando a veces la llave tan lejos que ni estiramos la mano para cogerla.
Nos sentimos perdidos, sin rumbo, como decia el bolero de los Panchos.
Pero pocos son los que miran el dolor de frente, cara a cara, sacando pecho y dejandose llevar por el.
Nadie se para a pensar en que porque la vida nos manda esos laberintos,
esas situaciones que nos ensombrecen el alma robandonos una sonrisa que creemos irremplazable.
Culpamos a Dios, a los astros o todo el universo...
Que equivocados estamos cuando peleamos con esos pulsos indomables.....
sin saber que nada se puede hacer,
que cuando llega, pues llega y no tenemos remedio.
Mi idea no es la panacea, si siquiera es una maravilla,
pero a mi empieza a funcionarme.
No luches, dejate llevar. Eso que sientes has de sentirlo, y llorarlo, y sacarlo,
no intentes evitar el sollozo ni mirar hacia otro lado.
Pasa tu pena, reconocela, hermanate con ella si es posible y esta misma te ayudara a hacerte mas fuerte.
El mundo nos pone trabas, las esquivamos o las enfrentamos "otro dia",
sin saber que a veces esa traba esta ahi para hacerte mejor persona, para hacerte TU MISMO.
Ahi espacios vacios que no se pueden tapar,
pero si juntamos todos nuestros espacios llenos,
bien apretaditos,
haremos que los vacios se noten menos.....
ELI
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