BIENVENIDO

A menudo me siento y me concentro en escuchar lo que mi alma me quiera contar...¿quieres leerlo?

jueves, 15 de diciembre de 2016

ME GUSTA QUE TE VAYAS

Me gusta que te vayas para echarte de menos,
para poder escribirte que mi piel te busca,
para poder sentir el frío que me deja tu ausencia.

Me gusta que te vayas para desear que vuelvas,
para contar los días con sus horas y minutos,
para imaginar el momento en el que te abrace de nuevo.

Me gusta que te vayas para recordar tu presencia,
para buscarte en mi mente,
para rememorar momentos con los ojos cerrados.

Me gusta que te vayas para imaginar que haces,
para contarte después mis días,
para que me cuentes los tuyos.

Me gusta que te vayas para dormir a veces sola
para estirarme en la cama buscando tu cuerpo,
para abrazar la almohada que perfumo con tu aroma.

Me gusta que te vayas para sentirme un poco vacía
para llenarme con otras cosas,
para que no seas mi epicentro y mi mundo se desmorone.

Me gusta que te vayas ...
me gusta que te vayas para que luego vuelvas.

 ELI,16

domingo, 4 de diciembre de 2016

RATICOS

A veces me faltan letras para expresar el huracán 
que me recorre por dentro cuando te pienso.
Intento organizar momentos, atesorar instantes 
y organizarlo todo en el baúl que guardo al final del 
pasillo de recorre mi alma, pero revolotean traviesos 
en cuanto cierro los ojos.

Se arremolinan envolviendo mi cuerpo 
y me rindo ante ellos totalmente desarmada.
Muchos instantes que me roban sonrisas
cuando me abordan, 
momentos que me calman cuando me cubren la mente,
como ese sueño liviano y placentero que me azota 
en cuanto descanso a tu lado. 

Me despojo de mi peso, 
de mis cargas impuestas, de todo lo que me sobra
y me acurruco en ti, me aovillo al calor de tus manos 
que me marcan el tiempo, que me frenan las prisas 
y entonces soy solo Yo cubierta de ti.

Momentos cargados de algo que me embriaga
que me vuelve volátil erizando mi piel, 
que me sacude el cuerpo haciendo que escupa 
palabras que navegan el corto recorrido que separa 
mi boca de tu oído. 

A veces me faltan palabras, se pierden o se esconden
dejando que sean mis manos las que recorriendo tu cara
te cuenten cuanto te quiero, 
dejando que sea mi cuerpo entero el que te busca 
hasta acoplarse al tuyo.

A veces me delatan mis ojos cuando te miran atentos
o mis labios cuando se posan en tu cuello.
A veces toda Yo me descubro y me muestro 
ante ti sin miedo y entonces me guardo en mi baúl 
esos destellos que produce tu mirada

A veces sucede que no encuentro lugar mas bonito 
que tu para pasar un rato.



ELI.16